Resumen primera edición Suq
Generando nuevos espacios para el común. Alternativas de recuperación para un sistema alimentario equilibrado.
Son las 6 de la tarde de un domingo en Córdoba. Zaza y Rafa aún se afanan por dejarlo todo impecable después de la celebración de Suq Centeno. Pronto llegarán la Red de Autodefensa Transfemisnista (RATA) y los Jóvenes por el Clima, colectivos que se citan por la tarde para realizar sus propias acciones. La actividad diaria es frenética y hermosamente variada en Luciana Centeno.
Mientras, sentados bajo el algarrobo, estamos cerrando el día atentos a la charla de Pepe Esquinas. Nos habla extensamente sobre su último libro “Rumbo al Ecocidio”: ¿Qué está fallando en un sistema agroalimentario que produce el 60 % más de lo necesario para alimentar a la humanidad y donde sin embargo pasan hambre más de 800 millones de personas, muchos de los cuales mueren, y además es responsable de casi el 30 % de los gases de efecto invernadero y de la pérdida de más del 90 % de la biodiversidad agrícola?
Podría parecer el peor epílogo a un día vibrante, sin embargo, Pepe habla desde la esperanza de convertir a todas y cada una de nosotras en activistas. “Si lo logramos, seremos capaces de revertir la situación”. Lo dice un hombre de 79 años que ha dedicado 30 a la FAO y que ha visto más miseria que nadie, lo dice alguien que tiene una colección de casi 300 variedades de melón y es consciente de que hoy en día solo se siembran 10, lo dice alguien que te cuenta que cada cuatro segundos muere un persona de hambre mientras la agroindustria tira más de lo que produce. Y su discurso es tan honesto y accesible que pronto aparece una pregunta inevitablemente dolorosa: ¿si la mayoría sabemos (o tenemos cierta idea) de todo esto, por qué no estamos actuando? Claro, el capitalismo, siempre el capitalismo, se oye en el corrillo que hemos formado. “Bueno, vale, el capitalismo, entonces, ¿podemos desestabilizarlo un poquito?” Nos contesta Pepe.
De eso y de otras cosas va Suq Centeno, de la desestabilización de modelos que ya no nos sirven, empezando por los locales. No nos sirve el sistema alimentario actual como tampoco la planificación urbana de Córdoba. Queremos comer bien y queremos árboles. ¿Aspiraciones tan radicales? A priori parece más bien un llamamiento a la conquista de derechos básicos. Por eso, muchas gracias a los productores y artesanos que os habéis acercado a Suq. Quieren que seáis utopía, pero sois realidad (realidad chiquita) pero rotunda en vuestro discurso, el único practicable contra la situación de emergencia en los sistemas agroalimentarios, el único que decididamente apuesta por revertir ese “Rumbo al Ecocidio” del que nos alerta Pepe Esquinas.
Gracias a Valen por varear y ordeñar su olivar de montaña en Villaviciosa, demostrando así, alternativas de calidad al sistema hiperintensivo y la destrucción de nuestro Guadalquivir. De esa prensa salió oro, y mojándolo con el pan de escanda de Culturhaza cocido por Pepe Soler, más de une tuvo un momento epifánico. Aquel mojeteo se volvió “viral” ayer en Suq mientras Agripino, Protasia, Felisa y Lucía no paraban de contar su proyecto, Culturhaza, un espacio AgroPunkAnarcoPoético donde las bolsas de harina de escanda molida a la piedra vuelan con sonetos. ¡Grande!
Por aquella esquina revoloteaban también Ana Garrido y José María Penco, ambos ingenieros agrónomos, ambos curtidos en mil batallas de congresos. Nos irán proporcionando datos en próximos días sobre aceites y cómo podemos generar un etiquetado voluntario para transmitir la información productor-consumidor de manera más cercana. También, dejados llevar por la deriva utópica de pensamiento para la ciudad de futuro que se respiraba en Suq, José María nos habló del sueño de crear un bosque urbano con todas las variedades de olivar del Mediterráneo. ¡Te tomamos la palabra!
Cerramos la trilogía mediterránea (Olivar, Cereal, Vid) con la presencia de los vinos de Paqui (Marenas Viñedos y Bodega) y su sobrino Manolo, ambos de Montilla. Habláis de la tierra y los suelos en vuestro paisaje, de su cuidado, de las variedades autóctonas como la montepilas, de hacer vinos con levaduras autóctonas, sin aditivos, sin “mierdas”. Habláis y luego nos hacéis más felices. ¡Ojalá fuéramos más sensatos desde el trago que elegimos!
Cerca de ellos, a la derecha, dos proyectos que buscan la sensatez desde el autoabastecimiento, Neoraíces y la Fresnedilla. Jony y Patricia han traído plantones de Guadalmez: romeros, lavandas, salvia…hierbas tan importantes para el equilibrio de nuestros ecosistemas y para elevar el gusto de nuestros platos. También comparten sus próximas jornadas de agrocultura, ya un clásico de Neoraíces, este año del 26-28 abril. Y también comparten, una maleta llena de semillas que es más grande que el Banco Mundial de Semillas de Svalbard. Y señalamos lo de “grande” porque como nos recuerda nuestra amiga María José Suso, los bancos de semillas deben estar activados por el campesinado.
***Podéis indagar más en el proyecto de Mariona Moncunil junto a MJ Suso, Ana Garrido y Paqui Herrera. Burocracia, un disco en el botánico.
De esto también saben Dani y Pablo de la “Fresne”, no hay más que ver sus coles, coliflores y tagarninas. Volaron en dos segundos. Desde Obejo, acompañados de la familia, nos meten por los ojos y la boca, sus aceites, mieles, compotas y orujos que inspiran modelos de hogar lo más autoabastecidas posibles. ¡Viva!
Esquinado pero central para hacer la compra del Suq, Huerta Chica. Una “L” de brotes verdes, acelgas rojas y zanahorias moradas que van a dar mucha felicidad al barrio esta semana. Huerta Chica son activadores de semillas de Culturhaza (a los que agradecen esa generosidad en el intercambio, no solo de las semillas, sino del conocimiento). Y han traído también sus naranjas recién cosechadas (gracias por no lavarlas) y llenas del frío de la noche. ¡Éxtasis! Hay que darles cariño para que continúen este proyecto tan ilusionante, más ahora, que la producción a pequeña escala en Córdoba es tan escasa.
Tarde pero llega Floren, de la panadería La Tradición. Toda la semana con horarios de panadería y haces el esfuerzo por venir a Suq. Y vienes y desparramas panes que cortas y regalas, porque tu misión aquí, como nos comentas, es conocer a los demás, empaparte de lo que pasa en tu ciudad con la gente que como tú, está en el rock&roll de la producción. Por supuesto, acabas hablando con Agripino, (vuestro dios sabrá de qué), imaginamos que de la pasión compartida por los cereales antiguos, las harinas molidas con gusto y ese repaso a Córdoba como tierra fértil a recuperar.
De todo lo que hablamos y de más, conocen bien la Red de Permacultura de Córdoba y Permadiverso. Se han pasado la mañana tan ilusionados y activos difundiendo el mensaje que fue un acierto darles la única mesa redonda.
Y por último nuestras queridas artesanas. Han venido con el mismo amor de siempre para reivindicar actividades y tecnologías del pasado que son nuestro futuro. Lo hacen desde la fabricación de jabones con aceites usados y la elaboración de productos para nuestra piel y nuestra alma (Círculo Cerrado), las enseñanzas cerámicas aquí mismo en el barrio (Esmalte Rojo), el reciclaje de tejidos y la pedagogía del hacer con las agujas aquí mismito en Luciana Centeno (Toc-Toc Craft); y Álvaro Montaño, uno de los últimos alfareros (de verdad, no industrial) que queda en la Rambla. Su puesto, repleto de botijos, botijos con forma de gallo, cántaros, jarras y cuencos, es una gran pella de barro de su pueblo convertida en aparatos refrigerantes sostenibles. ¡Con tu tostada no admitas la botellita de agua, exige el botijo!
Nos endulza y cura a todos Antonio de Verdemiel con una mesa policromática que suscita infinidad de preguntas, desde el vecino que no se cree que sean mieles, “cada flor da su color” contesta Antonio, hasta el aprendizaje del concepto de “miel cruda”, aprendiendo que en el súper lo que te llevas es mezcla de mieles pasteurizadas y filtradas, ¡Qué engaño, así no cura igual! Polen, jaleas y sus dos bebés pululando por Luciana, familia agradecida porque Suq concilia e informa, cierra el círculo de un zoco que está abierto a seguir, no soñando sino PRACTICANDO en Costanillas y San Agustín un barrio vivo.
Y sobre todo daros las gracias a todas las personas que, con vuestra asistencia e interés, contribuís a crear nuevos y fluidos caminos de entendimiento y de comunidad.
Gracias a Zhenxiang Zhao por este video resumen.
Podría parecer el peor epílogo a un día vibrante, sin embargo, Pepe habla desde la esperanza de convertir a todas y cada una de nosotras en activistas. “Si lo logramos, seremos capaces de revertir la situación”. Lo dice un hombre de 79 años que ha dedicado 30 a la FAO y que ha visto más miseria que nadie, lo dice alguien que tiene una colección de casi 300 variedades de melón y es consciente de que hoy en día solo se siembran 10, lo dice alguien que te cuenta que cada cuatro segundos muere un persona de hambre mientras la agroindustria tira más de lo que produce. Y su discurso es tan honesto y accesible que pronto aparece una pregunta inevitablemente dolorosa: ¿si la mayoría sabemos (o tenemos cierta idea) de todo esto, por qué no estamos actuando? Claro, el capitalismo, siempre el capitalismo, se oye en el corrillo que hemos formado. “Bueno, vale, el capitalismo, entonces, ¿podemos desestabilizarlo un poquito?” Nos contesta Pepe.
De eso y de otras cosas va Suq Centeno, de la desestabilización de modelos que ya no nos sirven, empezando por los locales. No nos sirve el sistema alimentario actual como tampoco la planificación urbana de Córdoba. Queremos comer bien y queremos árboles. ¿Aspiraciones tan radicales? A priori parece más bien un llamamiento a la conquista de derechos básicos. Por eso, muchas gracias a los productores y artesanos que os habéis acercado a Suq. Quieren que seáis utopía, pero sois realidad (realidad chiquita) pero rotunda en vuestro discurso, el único practicable contra la situación de emergencia en los sistemas agroalimentarios, el único que decididamente apuesta por revertir ese “Rumbo al Ecocidio” del que nos alerta Pepe Esquinas.
Gracias a Valen por varear y ordeñar su olivar de montaña en Villaviciosa, demostrando así, alternativas de calidad al sistema hiperintensivo y la destrucción de nuestro Guadalquivir. De esa prensa salió oro, y mojándolo con el pan de escanda de Culturhaza cocido por Pepe Soler, más de une tuvo un momento epifánico. Aquel mojeteo se volvió “viral” ayer en Suq mientras Agripino, Protasia, Felisa y Lucía no paraban de contar su proyecto, Culturhaza, un espacio AgroPunkAnarcoPoético donde las bolsas de harina de escanda molida a la piedra vuelan con sonetos. ¡Grande!
Por aquella esquina revoloteaban también Ana Garrido y José María Penco, ambos ingenieros agrónomos, ambos curtidos en mil batallas de congresos. Nos irán proporcionando datos en próximos días sobre aceites y cómo podemos generar un etiquetado voluntario para transmitir la información productor-consumidor de manera más cercana. También, dejados llevar por la deriva utópica de pensamiento para la ciudad de futuro que se respiraba en Suq, José María nos habló del sueño de crear un bosque urbano con todas las variedades de olivar del Mediterráneo. ¡Te tomamos la palabra!
Cerramos la trilogía mediterránea (Olivar, Cereal, Vid) con la presencia de los vinos de Paqui (Marenas Viñedos y Bodega) y su sobrino Manolo, ambos de Montilla. Habláis de la tierra y los suelos en vuestro paisaje, de su cuidado, de las variedades autóctonas como la montepilas, de hacer vinos con levaduras autóctonas, sin aditivos, sin “mierdas”. Habláis y luego nos hacéis más felices. ¡Ojalá fuéramos más sensatos desde el trago que elegimos!
Cerca de ellos, a la derecha, dos proyectos que buscan la sensatez desde el autoabastecimiento, Neoraíces y la Fresnedilla. Jony y Patricia han traído plantones de Guadalmez: romeros, lavandas, salvia…hierbas tan importantes para el equilibrio de nuestros ecosistemas y para elevar el gusto de nuestros platos. También comparten sus próximas jornadas de agrocultura, ya un clásico de Neoraíces, este año del 26-28 abril. Y también comparten, una maleta llena de semillas que es más grande que el Banco Mundial de Semillas de Svalbard. Y señalamos lo de “grande” porque como nos recuerda nuestra amiga María José Suso, los bancos de semillas deben estar activados por el campesinado.
***Podéis indagar más en el proyecto de Mariona Moncunil junto a MJ Suso, Ana Garrido y Paqui Herrera. Burocracia, un disco en el botánico.
De esto también saben Dani y Pablo de la “Fresne”, no hay más que ver sus coles, coliflores y tagarninas. Volaron en dos segundos. Desde Obejo, acompañados de la familia, nos meten por los ojos y la boca, sus aceites, mieles, compotas y orujos que inspiran modelos de hogar lo más autoabastecidas posibles. ¡Viva!
Esquinado pero central para hacer la compra del Suq, Huerta Chica. Una “L” de brotes verdes, acelgas rojas y zanahorias moradas que van a dar mucha felicidad al barrio esta semana. Huerta Chica son activadores de semillas de Culturhaza (a los que agradecen esa generosidad en el intercambio, no solo de las semillas, sino del conocimiento). Y han traído también sus naranjas recién cosechadas (gracias por no lavarlas) y llenas del frío de la noche. ¡Éxtasis! Hay que darles cariño para que continúen este proyecto tan ilusionante, más ahora, que la producción a pequeña escala en Córdoba es tan escasa.
Tarde pero llega Floren, de la panadería La Tradición. Toda la semana con horarios de panadería y haces el esfuerzo por venir a Suq. Y vienes y desparramas panes que cortas y regalas, porque tu misión aquí, como nos comentas, es conocer a los demás, empaparte de lo que pasa en tu ciudad con la gente que como tú, está en el rock&roll de la producción. Por supuesto, acabas hablando con Agripino, (vuestro dios sabrá de qué), imaginamos que de la pasión compartida por los cereales antiguos, las harinas molidas con gusto y ese repaso a Córdoba como tierra fértil a recuperar.
De todo lo que hablamos y de más, conocen bien la Red de Permacultura de Córdoba y Permadiverso. Se han pasado la mañana tan ilusionados y activos difundiendo el mensaje que fue un acierto darles la única mesa redonda.
Y por último nuestras queridas artesanas. Han venido con el mismo amor de siempre para reivindicar actividades y tecnologías del pasado que son nuestro futuro. Lo hacen desde la fabricación de jabones con aceites usados y la elaboración de productos para nuestra piel y nuestra alma (Círculo Cerrado), las enseñanzas cerámicas aquí mismo en el barrio (Esmalte Rojo), el reciclaje de tejidos y la pedagogía del hacer con las agujas aquí mismito en Luciana Centeno (Toc-Toc Craft); y Álvaro Montaño, uno de los últimos alfareros (de verdad, no industrial) que queda en la Rambla. Su puesto, repleto de botijos, botijos con forma de gallo, cántaros, jarras y cuencos, es una gran pella de barro de su pueblo convertida en aparatos refrigerantes sostenibles. ¡Con tu tostada no admitas la botellita de agua, exige el botijo!
Nos endulza y cura a todos Antonio de Verdemiel con una mesa policromática que suscita infinidad de preguntas, desde el vecino que no se cree que sean mieles, “cada flor da su color” contesta Antonio, hasta el aprendizaje del concepto de “miel cruda”, aprendiendo que en el súper lo que te llevas es mezcla de mieles pasteurizadas y filtradas, ¡Qué engaño, así no cura igual! Polen, jaleas y sus dos bebés pululando por Luciana, familia agradecida porque Suq concilia e informa, cierra el círculo de un zoco que está abierto a seguir, no soñando sino PRACTICANDO en Costanillas y San Agustín un barrio vivo.
Y sobre todo daros las gracias a todas las personas que, con vuestra asistencia e interés, contribuís a crear nuevos y fluidos caminos de entendimiento y de comunidad.
Gracias a Zhenxiang Zhao por este video resumen.
